Friday, June 27, 2014
Sunday, February 12, 2012
"La hija del pez espada" por Dante Sanchez
LA HIJA DEL PEZ ESPADA
Dominicano criado bien pa’ dentro, Teófilo (El Pez Espada) le dice a Yvonne, con voz suave; "Sabes, eres la hija que mas quiero". Pero María Dolores (Doña Loló), apareció desde el fondo de la casa, meciendo su cuerpo grande, fuerte y añoso y en voz alta, dijo: " Esa muchacha es igualita a su papá, esa es una ingrata."
Yvonne no entendía, y callaba.
Teófilo se fue a Puerto Rico, decía la gente, que por lo mandona que era Doña Loló. Lo que pasó en realidad y que rebozó el vaso, fue el día que Loló le estrelló la foto de Trujillo. Villa Consuelo entero comenzó a comentar que, "El Pez Espada era comunista, porque rompió el retrato del benefactor de la patria.". Teofilo tuvo que esconderse, huir para Santiago, cambiarse el nombre y luego emigrar para Puerto Rico.
Yvonne Rivera, la hija del Pez Espada, el hombre que cortaba en el aire cuando estaba con mujeres, se sentía insegura, le hacía falta la fortaleza, la espalda grande de Teófilo.
Se inició la época de la miseria. Yvonne y su madre tuvieron que arrimarse en la casa de la tía Vina, que tenía cuchicientos muchachos. En esa casa cuando llamaban a comer, el que no aparecía rápidamente se quedaba con hambre. Ahí había una comida de arroz blanco vacío por día.
La vieja Loló dejaba a Yvonne en una casa diferente cada día, para comer y no molestar a una sola parte de la familia.
Una vez, Yvonne rompió una rama de los molondrones que cruzaba la cerca del vecino a su casa. Ella los cortó, los preparó, se hartó, nadie le pidió y a nadie le ofreció, "de ahí en adelante me comenzaron a gustar los molondrones".
Un día, un dominican-york, maduro, amigo de don Teofilo, visitó a Yvonne, y le encantó la belleza cándida de la joven dominicana. Miguel Ángel, que así se llamaba, pidió permiso al Pez Espada para hacerle los papeles a Yvonne y llevarla para Nueva York. Yvonne recordaba lo mal que Loló trataba al Pez Espada, y esto la hacia recordar el abuso que la susodicha le daba y se sentía mucho peor.
La espera de dos años para los papeles de viaje fue larga. La oración era el único medio para manejar la situación. "Diosito, ayúdame a que estos papeles salgan para salir de este maldito infierno". Cuando Loló supo lo del viaje le ofreció golpes a Yvonne."Te voy a hartar a galletas".
En medio de la situación, Yvonne conoció a Manuel, quien sería el tramitador de los papeles oficiales. Cuando ella vio el carro entrando, Yvonne no sabía quien era. "Guay, que pelo mas lindo tiene ese hombre, que ojos, este es el hombre más bello del mundo, estoy prendida". El hombre se fue y regresó ocho meses más tarde, la llamaba y la invitaba a comer helados al Hotel Napolitano, en la avenida George Washington.
"No, aquí usted no puede traer hombres, porque se los van a dar de maridos", dijo Loló con su fuerte y firme voz.
Era un atardecer en Santo Domingo, el calor envolvía los objetos. Yvonne ya había cumplido años en Noviembre, Manuel le dijo: "Vamos a dar un paseo". La montó en el carro y la llevó a un lugar llamado El Campito. Un mes después, hicieron el mismo escape y fueron al hotel Fiesta. Loló ni siquiera se lo imaginaba.
Yvonne escapٕó hacia los Estados Unidos, al llegar suspiró y dijo: "que vacío, tengo libertad, pero dejo atrás al ser que más quiero, a Manolito ". Se dice que Doña Loló lloró y se volvió loca.
Yvonne sintió sus tripas danzando un baile de palos, el corazón entró en una carrera sin desaceleración y se tornó roja cuando el primer gringo se dirigió a ella. Ella solo supo decir "I ron nou".
La gringa de la fábrica la puso a trabajar, a empacar. La gringa era baja, blanquita y hablaba un idioma fino, lo consideró un lenguaje estelar, ella pensó que ese era el modo de hablar de los ángeles.
Para aprender inglés, Yvonne comenzó a ver en televisión el programa Eyes Witness News, para hacer oídos, luego fue al Hispanic American Institute, estudió y finalizó su cuarto año. Hizo su ciudadanía norteamericana, trabajó toda su vida y ahora está retirada y se queda en casa viviendo un día a la vez.
Dominicano criado bien pa’ dentro, Teófilo (El Pez Espada) le dice a Yvonne, con voz suave; "Sabes, eres la hija que mas quiero". Pero María Dolores (Doña Loló), apareció desde el fondo de la casa, meciendo su cuerpo grande, fuerte y añoso y en voz alta, dijo: " Esa muchacha es igualita a su papá, esa es una ingrata."
Yvonne no entendía, y callaba.
Teófilo se fue a Puerto Rico, decía la gente, que por lo mandona que era Doña Loló. Lo que pasó en realidad y que rebozó el vaso, fue el día que Loló le estrelló la foto de Trujillo. Villa Consuelo entero comenzó a comentar que, "El Pez Espada era comunista, porque rompió el retrato del benefactor de la patria.". Teofilo tuvo que esconderse, huir para Santiago, cambiarse el nombre y luego emigrar para Puerto Rico.
Yvonne Rivera, la hija del Pez Espada, el hombre que cortaba en el aire cuando estaba con mujeres, se sentía insegura, le hacía falta la fortaleza, la espalda grande de Teófilo.
Se inició la época de la miseria. Yvonne y su madre tuvieron que arrimarse en la casa de la tía Vina, que tenía cuchicientos muchachos. En esa casa cuando llamaban a comer, el que no aparecía rápidamente se quedaba con hambre. Ahí había una comida de arroz blanco vacío por día.
La vieja Loló dejaba a Yvonne en una casa diferente cada día, para comer y no molestar a una sola parte de la familia.
Una vez, Yvonne rompió una rama de los molondrones que cruzaba la cerca del vecino a su casa. Ella los cortó, los preparó, se hartó, nadie le pidió y a nadie le ofreció, "de ahí en adelante me comenzaron a gustar los molondrones".
Un día, un dominican-york, maduro, amigo de don Teofilo, visitó a Yvonne, y le encantó la belleza cándida de la joven dominicana. Miguel Ángel, que así se llamaba, pidió permiso al Pez Espada para hacerle los papeles a Yvonne y llevarla para Nueva York. Yvonne recordaba lo mal que Loló trataba al Pez Espada, y esto la hacia recordar el abuso que la susodicha le daba y se sentía mucho peor.
La espera de dos años para los papeles de viaje fue larga. La oración era el único medio para manejar la situación. "Diosito, ayúdame a que estos papeles salgan para salir de este maldito infierno". Cuando Loló supo lo del viaje le ofreció golpes a Yvonne."Te voy a hartar a galletas".
En medio de la situación, Yvonne conoció a Manuel, quien sería el tramitador de los papeles oficiales. Cuando ella vio el carro entrando, Yvonne no sabía quien era. "Guay, que pelo mas lindo tiene ese hombre, que ojos, este es el hombre más bello del mundo, estoy prendida". El hombre se fue y regresó ocho meses más tarde, la llamaba y la invitaba a comer helados al Hotel Napolitano, en la avenida George Washington.
"No, aquí usted no puede traer hombres, porque se los van a dar de maridos", dijo Loló con su fuerte y firme voz.
Era un atardecer en Santo Domingo, el calor envolvía los objetos. Yvonne ya había cumplido años en Noviembre, Manuel le dijo: "Vamos a dar un paseo". La montó en el carro y la llevó a un lugar llamado El Campito. Un mes después, hicieron el mismo escape y fueron al hotel Fiesta. Loló ni siquiera se lo imaginaba.
Yvonne escapٕó hacia los Estados Unidos, al llegar suspiró y dijo: "que vacío, tengo libertad, pero dejo atrás al ser que más quiero, a Manolito ". Se dice que Doña Loló lloró y se volvió loca.
Yvonne sintió sus tripas danzando un baile de palos, el corazón entró en una carrera sin desaceleración y se tornó roja cuando el primer gringo se dirigió a ella. Ella solo supo decir "I ron nou".
La gringa de la fábrica la puso a trabajar, a empacar. La gringa era baja, blanquita y hablaba un idioma fino, lo consideró un lenguaje estelar, ella pensó que ese era el modo de hablar de los ángeles.
Para aprender inglés, Yvonne comenzó a ver en televisión el programa Eyes Witness News, para hacer oídos, luego fue al Hispanic American Institute, estudió y finalizó su cuarto año. Hizo su ciudadanía norteamericana, trabajó toda su vida y ahora está retirada y se queda en casa viviendo un día a la vez.
Saturday, November 20, 2010
EL EMBRUJO DE LA CIGUAPA
POR DANTE SANCHEZ
Danny era un niño como todos, corriendo, practicando lucha libre con su padre en los días de fiesta y siempre con una sonrisa. Tenía 10 años. Era el menor de de cuatro hermanos, por lo tanto, era el mimado de la familia. Las mujeres decían que era un niño hermoso, lo decían tanto y tan frecuente, que hasta él se lo llegó a creer.
No había visitado Santo Domingo por algo más de tres años, desde que su familia se mudó a los Estados Unidos. Ese verano sus padres lo enviaron, junto con sus dos hermanas, Samanta y Daniela, y su hermano mayor, Samuel, a Santo Domingo, de vacaciones. “Para que no pierda contacto con sus raíces”, dijo su padre.
Al llegar al barrio San Carlos, se reunía todas las noches con sus nuevos amiguitos para hacer cuentos. Cuando la energía eléctrica fallaba, la ciudad se quedaba a oscura. Los jóvenes encendían velas y aprovechaban para hacer cuentos de seres misteriosos, fue la primera vez que escuchó hablar de un Bacá, y de la Ciguapa. Oyó decir que el Bacá era un animal que tenían los que hacían pactos con las fuerzas oscuras del universo, para hacerse ricos y que la Ciguapa era una mujer que tenía los pies al revés y quien la miraba a los ojos moría al instante.
Al mes de estar allá, ya había visitado la playa de Boca Chica, la cueva de los Tres Ojos, y el zoológico. Ese mismo día, al anochecer, llego el tío Francisco, con las manos sucias y la ropa también de un aceite negro, llamó a todos a la sala y dijo: “Prepárense, ya arreglé la carrancha y mañana temprano salimos para Villa Riva a visitar a la abuela Dolores”.
Al día siguiente, llegaron a las cinco de la tarde al pueblo de la abuela. En la casa al entrar un perro, blanco con manchas negras ladraba, todos se sintieron con miedo, que desapareció cuando oyeron la voz de la abuela diciendo: “Laica, venga acá…no se preocupen, desde que los conozca, ya no les hace nada”. Laica fue a los piés de la abuela moviendo el rabo. Después de bañarse y comer plátano asado, machacado en pilón con “zurrapa de chicharrón”, se vistieron y se fueron al parque.
Era una noche preciosa, con un cielo completamente claro y una luna llena. Danny ya le había tomado confianza a Laica y estaba practicando lucha libre con el animal, en la hierba del parque. Notó que Laica tenía cinco dedos en cada pata. Informó de esta gran noticia a su tío, quien dijo: “Es una perra cinqueña completa, eso trae buena suerte”
Danny siguió jugando, cuando de repente observó una sombra de mujer corriendo en el lote vacío, frente al parque. Laica salió corriendo detrás de la sombra. El la miró tropezar y caerse en la hierba.
Corrió para ver si podía ayudar, se sintió paralizado cuando vió que la mujer estaba desnuda. Observó su cara, ella miraba hacia abajo, su pelo era largo y brillante, “se parece a la virgen María”, pensó. Percibió un musical quejido de su boca, cuando notó que Laica le mordía un pié, inmediatamente, agarró a Laica, y dijo: “Laica, suéltala”, la perra la soltó, y Danny se cayó de espalda. Cayendo, se dió cuenta que la anatomía del pie no se correspondía con la dirección del cuerpo, “está roto el pie”, fue el pensamiento que cruzó su mente.
La mujer se levantó, se acercó a Danny, lo miró a los ojos y se alejó caminando hacia atrás, silbando una canción entre sus dientes, mientras permanecía mirándolo, hasta perderse en la oscuridad.
Danny se levantó, se fue callado al parque, no jugó más con Laica, regresó a Santo Domingo, y luego viajó a Filadelfia. Hace poco cumplió sus 23 años, no tiene novia y no habla con nadie. La gente dice que aun está enamorado de la mujer desnuda, pero otros dicen que es el embrujo que le echó la Ciguapa.
Danny era un niño como todos, corriendo, practicando lucha libre con su padre en los días de fiesta y siempre con una sonrisa. Tenía 10 años. Era el menor de de cuatro hermanos, por lo tanto, era el mimado de la familia. Las mujeres decían que era un niño hermoso, lo decían tanto y tan frecuente, que hasta él se lo llegó a creer.
No había visitado Santo Domingo por algo más de tres años, desde que su familia se mudó a los Estados Unidos. Ese verano sus padres lo enviaron, junto con sus dos hermanas, Samanta y Daniela, y su hermano mayor, Samuel, a Santo Domingo, de vacaciones. “Para que no pierda contacto con sus raíces”, dijo su padre.
Al llegar al barrio San Carlos, se reunía todas las noches con sus nuevos amiguitos para hacer cuentos. Cuando la energía eléctrica fallaba, la ciudad se quedaba a oscura. Los jóvenes encendían velas y aprovechaban para hacer cuentos de seres misteriosos, fue la primera vez que escuchó hablar de un Bacá, y de la Ciguapa. Oyó decir que el Bacá era un animal que tenían los que hacían pactos con las fuerzas oscuras del universo, para hacerse ricos y que la Ciguapa era una mujer que tenía los pies al revés y quien la miraba a los ojos moría al instante.
Al mes de estar allá, ya había visitado la playa de Boca Chica, la cueva de los Tres Ojos, y el zoológico. Ese mismo día, al anochecer, llego el tío Francisco, con las manos sucias y la ropa también de un aceite negro, llamó a todos a la sala y dijo: “Prepárense, ya arreglé la carrancha y mañana temprano salimos para Villa Riva a visitar a la abuela Dolores”.
Al día siguiente, llegaron a las cinco de la tarde al pueblo de la abuela. En la casa al entrar un perro, blanco con manchas negras ladraba, todos se sintieron con miedo, que desapareció cuando oyeron la voz de la abuela diciendo: “Laica, venga acá…no se preocupen, desde que los conozca, ya no les hace nada”. Laica fue a los piés de la abuela moviendo el rabo. Después de bañarse y comer plátano asado, machacado en pilón con “zurrapa de chicharrón”, se vistieron y se fueron al parque.
Era una noche preciosa, con un cielo completamente claro y una luna llena. Danny ya le había tomado confianza a Laica y estaba practicando lucha libre con el animal, en la hierba del parque. Notó que Laica tenía cinco dedos en cada pata. Informó de esta gran noticia a su tío, quien dijo: “Es una perra cinqueña completa, eso trae buena suerte”
Danny siguió jugando, cuando de repente observó una sombra de mujer corriendo en el lote vacío, frente al parque. Laica salió corriendo detrás de la sombra. El la miró tropezar y caerse en la hierba.
Corrió para ver si podía ayudar, se sintió paralizado cuando vió que la mujer estaba desnuda. Observó su cara, ella miraba hacia abajo, su pelo era largo y brillante, “se parece a la virgen María”, pensó. Percibió un musical quejido de su boca, cuando notó que Laica le mordía un pié, inmediatamente, agarró a Laica, y dijo: “Laica, suéltala”, la perra la soltó, y Danny se cayó de espalda. Cayendo, se dió cuenta que la anatomía del pie no se correspondía con la dirección del cuerpo, “está roto el pie”, fue el pensamiento que cruzó su mente.
La mujer se levantó, se acercó a Danny, lo miró a los ojos y se alejó caminando hacia atrás, silbando una canción entre sus dientes, mientras permanecía mirándolo, hasta perderse en la oscuridad.
Danny se levantó, se fue callado al parque, no jugó más con Laica, regresó a Santo Domingo, y luego viajó a Filadelfia. Hace poco cumplió sus 23 años, no tiene novia y no habla con nadie. La gente dice que aun está enamorado de la mujer desnuda, pero otros dicen que es el embrujo que le echó la Ciguapa.
Monday, May 11, 2009
DOMINICANOS EN FILADELFIA
Dominicanos
DOMINICANS
• Over 9 of every 10 Dominicans
and Central Americans spoke a
language other than English at
home, the highest rate among
Hispanic groups.
DOMINICANS
• The proportion who had attained
at least a bachelor’s degree varied
considerably: 11 percent of both Other
Hispanics and Dominicans,
DOMINICANS
• The gender gap in labor force
participation rates was larger in
the Hispanic population than in
the total population (a 16 percentage-
point difference compared
with a 13 percentage-point
difference). while Other Hispanics, Puerto
Ricans, and Dominicans had the
smallest gap (about 11 percentage
points each).9
HISPANICS IN GENERAL
Proportionately more
Hispanic women than
Hispanic men held
managerial or
professional jobs.
DOMINICANS
Median family income : $28,700 for
Dominicans.
DOMINICANS
People from the Dominican Republic have massively moved out of their home country in search of a better life in North America. Dominican immigrant settlements in America date from the mid-1960s. The size of this community in the United States grew tremendously in the 1970s and 1980s. There is 65% of Dominicans living as permanent residents in the state of New York (Torres-Saillant & Hernandez, 1998).
DOMINICANS
Between 1961 and 1986 more than 400,000 people legally immigrated to the United States from the Dominican Republic, and another 44,000 moved to Puerto Rico, while thousands more entered both places illegally. More than 300,000 Dominican lived in New York City by 1990, and the total was expected to reach 700,000 early in the millennium, making Dominican migration one of the largest to this country of the past forty years. Dominicans went largely unnoticed at first.
DOMINICANS
They proved more adept at business enterprise, launching thousands of bodegas, supermarkets, and consumer goods stores in New York City, just as Cubans were doing in Miami. Manhattan’s Washington Height became their El Barrio and their Little Havana
DOMINICANS
the good news is that second-generation Dominicans have achieved considerably higher levels of education and secured better jobs than their foreign-born elders (Castro & Boswell, 2002).
DOMINICANS
From 1988 to 1998, a total of 401,646 Dominicans were admitted to the United States. This figure is almost twice the total admitted from any other country in the Caribbean (Castro & Boswell, 2002).
Dominicans in Philadelphia
Dominicans
Population: 4,337 estimated by the Census 2000
DOMINICANS
As of 2000, Philadelphia had the 14th largest Dominican population in the United States
DOMINICANS
Where they are living: Dominicans are settling largely in North Philadelphia amongst the Puerto Rican community. There are also small numbers of Dominicans settling in West Philadelphia and the Northeast.
DOMINICANS
Prior to 1990, there were very small numbers of Dominicans living in Philadelphia. After 1990, the Dominican community experiences rapid growth as large numbers of Dominicans move to Philadelphia from New York seeking work, affordable housing, and safer neighborhoods
DOMINICANS
Dominicans create an enclave during the 1990s and open bodegas, travel agencies, money houses and other businesses in North Philadelphia and other parts of the city.
DOMINICANS
The community continues to grow as relatives from the Dominican Republic move to reunite with family members in Philadelphia and others come seeking economic opportunities, higher education.
DOMINICANS
• Over 9 of every 10 Dominicans
and Central Americans spoke a
language other than English at
home, the highest rate among
Hispanic groups.
DOMINICANS
• The proportion who had attained
at least a bachelor’s degree varied
considerably: 11 percent of both Other
Hispanics and Dominicans,
DOMINICANS
• The gender gap in labor force
participation rates was larger in
the Hispanic population than in
the total population (a 16 percentage-
point difference compared
with a 13 percentage-point
difference). while Other Hispanics, Puerto
Ricans, and Dominicans had the
smallest gap (about 11 percentage
points each).9
HISPANICS IN GENERAL
Proportionately more
Hispanic women than
Hispanic men held
managerial or
professional jobs.
DOMINICANS
Median family income : $28,700 for
Dominicans.
DOMINICANS
People from the Dominican Republic have massively moved out of their home country in search of a better life in North America. Dominican immigrant settlements in America date from the mid-1960s. The size of this community in the United States grew tremendously in the 1970s and 1980s. There is 65% of Dominicans living as permanent residents in the state of New York (Torres-Saillant & Hernandez, 1998).
DOMINICANS
Between 1961 and 1986 more than 400,000 people legally immigrated to the United States from the Dominican Republic, and another 44,000 moved to Puerto Rico, while thousands more entered both places illegally. More than 300,000 Dominican lived in New York City by 1990, and the total was expected to reach 700,000 early in the millennium, making Dominican migration one of the largest to this country of the past forty years. Dominicans went largely unnoticed at first.
DOMINICANS
They proved more adept at business enterprise, launching thousands of bodegas, supermarkets, and consumer goods stores in New York City, just as Cubans were doing in Miami. Manhattan’s Washington Height became their El Barrio and their Little Havana
DOMINICANS
the good news is that second-generation Dominicans have achieved considerably higher levels of education and secured better jobs than their foreign-born elders (Castro & Boswell, 2002).
DOMINICANS
From 1988 to 1998, a total of 401,646 Dominicans were admitted to the United States. This figure is almost twice the total admitted from any other country in the Caribbean (Castro & Boswell, 2002).
Dominicans in Philadelphia
Dominicans
Population: 4,337 estimated by the Census 2000
DOMINICANS
As of 2000, Philadelphia had the 14th largest Dominican population in the United States
DOMINICANS
Where they are living: Dominicans are settling largely in North Philadelphia amongst the Puerto Rican community. There are also small numbers of Dominicans settling in West Philadelphia and the Northeast.
DOMINICANS
Prior to 1990, there were very small numbers of Dominicans living in Philadelphia. After 1990, the Dominican community experiences rapid growth as large numbers of Dominicans move to Philadelphia from New York seeking work, affordable housing, and safer neighborhoods
DOMINICANS
Dominicans create an enclave during the 1990s and open bodegas, travel agencies, money houses and other businesses in North Philadelphia and other parts of the city.
DOMINICANS
The community continues to grow as relatives from the Dominican Republic move to reunite with family members in Philadelphia and others come seeking economic opportunities, higher education.
Sunday, October 5, 2008
Por Deyanira Payano
LAS TORGUGAS
Las tortugas comparten el planeta con nosotros los humanos, pero a diferencia de nosotros, ellas con la evolución han aprendido a defenderse sin dañar a los demás. Por ejemplo:0 cuando se ven amenazadas esconden sus órganos mas débiles y se protegen con su caparazón, pero nosotros cuando nos vemos amenazados escondemos nuestras fortalezas y atacamos con nuestras debilidades; esas que debemos ir soltando con nuestro crecimiento emocional, profesional y espiritual.
Me explico, cuando nos enojamos perdemos la capacidad de razonar y nos volvemos impulsivos, atacando a nuestros hermanos con odio, ira y envenenando nuestro sistema con resentimientos, cuando podríamos usar nuestras fortalezas, que son las que nos asemejan a nuestro líder existencial JESUS. Entre ellas la capacidad de amar y poder reconocer lo positivo en los demás. El perdón es el arma que nos ayuda a liberarnos y a liberar a otros.
Hoy quiero que juntos comencemos nuestra introspección (análisis de nuestro interior) y busquemos ahí nuestras debilidades, para enfrentar los problemas y comenzemos a combatirlos con nuestra arma poderosa, E L A M O R. Este nos guiará por un camino donde daremos a nuestros semejantes y por consiguiente no nos dañaremos nosotros mismos.
Nuestras amigas LAS TORTUGAS, no se estresan porque son conscientes de que sin importar la velocidad que lleven, siempre llegarán a su destino. Lo que pasa con nosotros los humanos, es que tenemos un reloj que es el dictador de nuestro tiempo, quien sin tener vida propia se ha apoderado de nuestras vidas.
Ahora es el momento de quitarle la batería a nuestro reloj físico e inyectar nuestra batería interna con pensamientos positivos reales y productivos que nos lleven a nuestra meta: LA FELICIDAD. Donde se entrelazan nuestras fortalezas y crecemos de una manera segura y prospera, entendiendo que somos parte del cosmo y que cada acción positiva traerá otra acción de la misma intensidad y que esta cadena nos hará seguros, felices y libres de estrés.
LAS TORTUGAS viven en familias o grupos iguales donde comparten y se protegen unos con otros, los débiles tienen el mismo derecho de existir que el fuerte, no sienten soledad porque son capaces de compartir sin competir, nosotros hemos cambiado nuestra naturaleza y entendemos progresar como competir.
El progreso para mi, es la capacidad de crecimiento espiritual, y te puedo asegurar que tu prosperidad no se mide en el banco, se mide en risas en fé y en salud. Si solo somos prosperos monetariamente, la soledad no dejará que disfrutemos lo que poseemos, entonces no seremos felices, por lógica no seremos prósperos si solo crecemos en una sola dirección.
Valoremos nuestras bendiciones y dejemos de querer lo que no poseemos, en esa lucha inútil no disfrutamos, somos soñadores persiguiendo pesadillas, sin darnos cuenta que nuestro sueño está en nuestras vivencias, en nuestros caminos, en cada acto de nuestras vidas, en cada sonrisa, en cada lágrima esta la felicidad que enmascaramos con nuestro pesimismo.
Re-aprendamos la lección de vida, estamos hechos de un material inoxidable, indestructible, estamos hechos de A M O R, pero nos debilitamos solamente con una sola arma E L P E S I M IS MO. NO DEJEMOS QUE NOS ALCANZE, LUCHEMOS Y SIGAMOS EL EJEMPLO DE NUESTRAS AMIGAS, LAS TORTUGAS, ELLAS DESCUBRIERON EL SECRETO DE VIVIR UNA LARGA Y EXITOSA VIDA.
Las tortugas comparten el planeta con nosotros los humanos, pero a diferencia de nosotros, ellas con la evolución han aprendido a defenderse sin dañar a los demás. Por ejemplo:0 cuando se ven amenazadas esconden sus órganos mas débiles y se protegen con su caparazón, pero nosotros cuando nos vemos amenazados escondemos nuestras fortalezas y atacamos con nuestras debilidades; esas que debemos ir soltando con nuestro crecimiento emocional, profesional y espiritual.
Me explico, cuando nos enojamos perdemos la capacidad de razonar y nos volvemos impulsivos, atacando a nuestros hermanos con odio, ira y envenenando nuestro sistema con resentimientos, cuando podríamos usar nuestras fortalezas, que son las que nos asemejan a nuestro líder existencial JESUS. Entre ellas la capacidad de amar y poder reconocer lo positivo en los demás. El perdón es el arma que nos ayuda a liberarnos y a liberar a otros.
Hoy quiero que juntos comencemos nuestra introspección (análisis de nuestro interior) y busquemos ahí nuestras debilidades, para enfrentar los problemas y comenzemos a combatirlos con nuestra arma poderosa, E L A M O R. Este nos guiará por un camino donde daremos a nuestros semejantes y por consiguiente no nos dañaremos nosotros mismos.
Nuestras amigas LAS TORTUGAS, no se estresan porque son conscientes de que sin importar la velocidad que lleven, siempre llegarán a su destino. Lo que pasa con nosotros los humanos, es que tenemos un reloj que es el dictador de nuestro tiempo, quien sin tener vida propia se ha apoderado de nuestras vidas.
Ahora es el momento de quitarle la batería a nuestro reloj físico e inyectar nuestra batería interna con pensamientos positivos reales y productivos que nos lleven a nuestra meta: LA FELICIDAD. Donde se entrelazan nuestras fortalezas y crecemos de una manera segura y prospera, entendiendo que somos parte del cosmo y que cada acción positiva traerá otra acción de la misma intensidad y que esta cadena nos hará seguros, felices y libres de estrés.
LAS TORTUGAS viven en familias o grupos iguales donde comparten y se protegen unos con otros, los débiles tienen el mismo derecho de existir que el fuerte, no sienten soledad porque son capaces de compartir sin competir, nosotros hemos cambiado nuestra naturaleza y entendemos progresar como competir.
El progreso para mi, es la capacidad de crecimiento espiritual, y te puedo asegurar que tu prosperidad no se mide en el banco, se mide en risas en fé y en salud. Si solo somos prosperos monetariamente, la soledad no dejará que disfrutemos lo que poseemos, entonces no seremos felices, por lógica no seremos prósperos si solo crecemos en una sola dirección.
Valoremos nuestras bendiciones y dejemos de querer lo que no poseemos, en esa lucha inútil no disfrutamos, somos soñadores persiguiendo pesadillas, sin darnos cuenta que nuestro sueño está en nuestras vivencias, en nuestros caminos, en cada acto de nuestras vidas, en cada sonrisa, en cada lágrima esta la felicidad que enmascaramos con nuestro pesimismo.
Re-aprendamos la lección de vida, estamos hechos de un material inoxidable, indestructible, estamos hechos de A M O R, pero nos debilitamos solamente con una sola arma E L P E S I M IS MO. NO DEJEMOS QUE NOS ALCANZE, LUCHEMOS Y SIGAMOS EL EJEMPLO DE NUESTRAS AMIGAS, LAS TORTUGAS, ELLAS DESCUBRIERON EL SECRETO DE VIVIR UNA LARGA Y EXITOSA VIDA.
Subscribe to:
Posts (Atom)